Ingredientes y como prepar un flamenquín

Lomo de cerdo, jamón curado, vino blanco, sal, pimienta, harina de trigo, pan rallado y huevos.

Como se preparan

En primer lugar antes de empezar, vamos a dejar el jamón macerándose un día en vino blanco seco. Con un martillo de cocina golpeamos los filetes de lomo y los extendemos, sazonamos con sal y pimienta (cuidado con la sal ya que el jamón curado también le va a aportar sal.) Una vez tenemos los filetes extendidos, le añadimos el jamón curado, y enrollamos. Preparamos un plato con harina de trigo, un bol con huevo batido, y otro con pan rallado. Listo esto, cogemos con cuidado el lomo enrollado con el jamón y lo pasamos por harina. Una vez enharinado pasamos por el huevo y después por el pan rallado, repetimos este a pasar por el huevo y por el pan, lo pasamos por el huevo y finalmente por el pan rallado, repetimos el proceso de pasar por el huevo y por el pan rallado.

 
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Cómo cocinarlos

Desde su origen, el flamenquín, es un plato que se sirve frito, aunque hay gente que los hace al horno. Nosotros vamos a explicar las dos formas de hacerse, aunque nuestra preferencia siempre sea la de freírlo, y como no, en Aceite de Oliva Virgen Extra.
Para freírlos necesitamos tener una cacerola con aceite abundante, o una freidora, y calentar hasta 180º, una vez alcanzada la temperatura, y no antes, ponemos los flamenquines y freímos hasta su aspecto dorado, lo normal es que en 4 minutos esté dorado y hecho por dentro. Es conveniente no poner más de tres o cuatro unidades para no reducir de forma brusca la temperatura del aceite.
Para hornearlos, solo tenemos que poner el horno a 180º, alcanzada la temperatura metemos los flamenquines en una bandeja y los dejamos hasta ver que su aspecto es dorado. Esta forma de cocinar los flamenquines requiere que vayamos dando la vuelta a los flamenquines.
Para cocinar los flamenquines debemos tener en cuenta que deben estar frescos. Si los tenemos congelados, debemos sacarlos unas horas antes de cocinarlos para evitar echarlos en el aceite congelados, ya que al sacarlos cuando el pan rallado esté en su punto, el lomo no se habrá cocinado bien y lo encontraremos crudo.